1 de noviembre de 2009

QUE SANO ES ARRANCARTE ESA RISA

El día viernes 23 de octubre emprendimos el segundo viaje hacia la provincia de Santiago del Estero para cumplir con la promesa de festejar con nuestros ahijados, su primer día del niño.

El sábado por la mañana llegamos a la localidad de la candelaria y nuestros peques y sus familias nos esperaron y recibieron con los brazos abiertos.

Mates y tortillas por medio, hablamos con Walter sobre sus actividades durante estos meses. Nos contó que el profesor de educación física asistió una clase y nunca mas volvió, sólo a firmar el acta y a justificar sus faltas con licencias inexistentes. Además, nos dijo que los niños esperaron sus clases un par de viernes y luego se resignaron a no volver a tenerlas. Una mezcla de desilusión, bronca e impotencia por la situación, que lamentablemente se repite en tantas escuelas olvidadas de nuestro país!

Luego de ponernos al día con todas las novedades, compartimos un almuerzo con los chicos y comenzaron los juegos. Un partido de futbol, carrera de embolsados, el baile de las sillas y diversas actividades que teníamos programadas para ellos.

A continuación, repartimos todos los regalos y juguetes que nos acercaron durante este tiempo. Los peques estaban inmensamente felices y nosotros... bueno, de más esta decir que siempre traemos el doble de lo que llevamos.

Horas de la tarde, armamos una merienda con golosinas, alfajores, leche chocolatada y una torta enorme que prepararon las mamas de la comunidad para festejar el cumpleaños de todos los chicos; y como en todo cumpleaños, no falto la piñata!

Por otra parte, los chicos prepararon una hermosa obra de teatro, un baile y recitaron poesías que ellos mismos eligieron en su taller literario.

Finalizamos el día y regresamos por la noche a la ciudad.

Al día siguiente volvimos a escuela; amasamos pizza para todos, compartimos guitarreada, fogón y mates de despedida.

Pasado el mediodía, emprendimos viaje hacia Buenos Aires.

Vivimos un fin de semana mágico con nuestros niños. Trajimos cada sonrisa, cada abrazo y todo el cariño que nos brindaron durante nuestra estadía en la comunidad! Volvimos con fuerzas renovadas para seguir adelante y continuar caminando.

Ha sido un verdadero placer estar con ellos y jugar a su lado como chicos.



“ahora cambiemos el mundo, amigo, que tu ya has cambiado el mío”


GRACIAS POR ACOMPAÑARNOS EN CADA VUELO!
P.N.J.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Que sano fue arrancarles esa risa!!!gracias chicos, Walter y amigos por compartir ésta experiencia inolvidable, los quiero.

Laura, proyecto nunca jamás.

Santa dijo...

Muy entrañable la sonrisa sincera de los niños... Nada comparable a ello...
Decirle a Walter que no se preocupe por el profe de educación física...
Él dará sus clases igual de bien.

Se nota que los niños son felices en su escuela ¿Cuántos de aquí lo son?

Rafa, de Madrid, proyecto nunca jamás.

Pau dijo...

una imagen dice mal que mil palabras...
besotes

Lola dijo...

Tanta felicidad no me entra en el corazón!!, las imágenes dicen más que mil palabras!!
Las caritas de los pèques, de Walter, de toda la comunidad hablan por si solas.
Gracias a todos los que lo hicieron posible; gracias chicas , gracias teso!!! Los adoro!!

A. Garcia dijo...

Porque, desde la experiencia, no existe nada más bonito que la sonrisa sincera de un niño, la puerta de su felicidad.

Seguid coleccionando sonrisas, seguid descubriendo tesoros.

El mundo lo necesita.